En el sexto día de la Novena Navideña, la Unidad Educativa «San Agustín» centró su reflexión en un valor fundamental para vivir la Navidad de manera auténtica: «La Sencillez». Este día, la comunidad educativa recordó que la verdadera grandeza no radica en lo material, sino en la humildad y la sencillez con la que vivimos nuestras vidas, un valor que se refleja en el nacimiento de Jesús, quien vino al mundo de una manera simple, pero llena de amor y paz.
Como en los días anteriores, los estudiantes cantaron villancicos, cuyas dulces melodías llenaron de luz y esperanza la jornada. Los villancicos, con su tono festivo y alegre, sirvieron para recordar a todos la belleza de la Navidad, celebrada no por lo que tenemos, sino por lo que somos: seres sencillos dispuestos a compartir lo mejor de nosotros mismos.
La representación del nacimiento de Jesús fue una vez más el momento central del día. Los estudiantes participaron con mucho entusiasmo, destacando, en particular, la humildad y sencillez de los personajes del pesebre: la Virgen María, San José, los pastores y los Reyes Magos. Esta representación enfatizó la belleza de la sencillez, donde cada acto de amor y devoción no requiere de grandes ostentaciones, sino de gestos sencillos que nacen del corazón.
Este sexto día de la Novena Navideña invitó a todos los miembros de la comunidad educativa a vivir con humildad, a valorar lo simple y a acercarse a los demás con un corazón sincero. «San Agustín» continúa celebrando la Navidad con la esperanza de que, al igual que el nacimiento de Jesús, nuestras acciones estén siempre llenas de sencillez, amor y paz.